La rabia es una enfermedad viral que afecta el sistema nervioso de los mamíferos, incluyendo a los michis y, por supuesto, a los humanos. Se transmite principalmente a través de la mordedura de un animal infectado, ya que el virus está presente en la saliva. En áreas donde la fauna salvaje (como murciélagos, mapaches o zorrillos) tiene acceso a zonas urbanas, el riesgo de contagio para nuestras mascotas es mayor. La rabia es extremadamente peligrosa y casi siempre mortal una vez que los síntomas aparecen, pero la buena noticia es que es 100% prevenible con las medidas adecuadas.
¿Cómo prevenir la rabia en mininos?
Aquí viene la gran noticia: la rabia en gatos es 100% prevenible si seguimos unas cuantas recomendaciones simples. Veamos qué puedes hacer para asegurarte de que tu michi esté completamente protegido.
1. Vacunación: la clave de todo
La forma más efectiva de proteger a tu minino contra la rabia es a través de la vacunación. La primera dosis debe administrarse alrededor de los 3 meses de edad, y a partir de ahí, las revacunaciones son esenciales según las indicaciones de tu veterinario (generalmente una vez al año o cada tres años, dependiendo del tipo de vacuna). No lo dejes para después, ya que mantener las vacunas al día es la mejor barrera contra esta peligrosa enfermedad.
2. Mantén a tu michi en casa
Aunque algunos gatos aman explorar el mundo exterior, limitar su acceso a áreas donde puedan tener contacto con animales salvajes reduce en gran medida el riesgo de exposición a la rabia. Si es necesario que tu minino salga, asegúrate de que sea bajo supervisión o en un espacio controlado, como un patio cerrado o un jardín seguro.
3. Controla el acceso de animales no vacunados
Si vives en una comunidad con muchos animales, asegúrate de que tus vecinos también estén comprometidos con la vacunación de sus mascotas. Los animales no vacunados representan un riesgo, y aunque tu minino no tenga contacto directo con ellos, podrían exponerse a un animal infectado que transite por la zona.
4. Conoce los síntomas de la rabia
Aunque es raro que un minino vacunado desarrolle rabia, es importante estar atento a los signos de la enfermedad. Los síntomas incluyen cambios en el comportamiento (agresividad o timidez extrema), babeo excesivo, dificultades para tragar, y desorientación. Si notas cualquiera de estos signos, contacta a tu veterinario inmediatamente.
La rabia es una enfermedad grave, pero proteger a tu minino es sencillo y completamente posible. La clave está en la prevención: mantener las vacunas al día y tomar algunas precauciones básicas en el entorno de tu gato. Así, no solo estarás protegiendo la salud de tu michi, sino también la de tu familia y comunidad. Recuerda también siempre brindarle alimento balanceado como Minino® Pollo y Res para que tu minino se encuentre saludable.